Juan Pedro, un mexicano originario del estado de Aguascalientes, centro del país, y a quien ya se le conoce como el hombre más obeso del mundo por sus 500 kilos de peso, iniciará esta semana un tratamiento en la ciudad de Guadalajara, capital del occidental estado de Jalisco, para reducir su obesidad.

El hombre, de 32 años, ha estado en cama los últimos seis añosya que no se puede mover debido a su enorme masa corporal y ha sido trasladado este martes de Aguascalientes a Guadalajara, ciudades separadas unos 220 kilómetros.

"Nunca supe qué me pasaba y miraba a mi madre y le preguntaba, pero no sabía tampoco. En casa nunca hemos tenido recursos así que mi cuerpo fue a su aire sin control alguno", contó Juan Pedro mediante un comunicado distribuido a los medios de comunicación. "Miraba de hacer dieta día tras día, pero tampoco funcionaba y me desesperaba. Finalmente mi cuerpo tuvo una mala reacción y estuve en coma un tiempo y ya de ahí desperté en una cama de donde nunca más me he movido", añadió.

SUFRE VARIAS ENFERMEDADES

La enfermedad de Juan Pedro es multifactorial. En primer lugar sufre un hipotiroidismo no tratado que "ha hecho estragos en su organismo de forma que lo ha ralentizado y provocado que lo que ingería su cuerpo lo almacenara en vez de quemarlo". También ha desarrollado diabetes tipo II que le provoca hipertensión y extremos intolerables de glucosa en sangre, y ambas no han sido tratadas. Además, el exceso de peso propició que se desarrollara agresivamente una enfermedad pulmonar obstructiva con carácter crónico (EPOC), y su cuerpo retiene líquidos de forma exagerada.

"Estamos ante una persona que probablemente resiste y aún no ha muerto gracias a su juventud, 32 años", declaró el doctor José Castañeda, quien se encargará del tratamiento en el centro Gastric Bypass Mexico de Guadalajara.

Castañeda, experto en obesidad, señaló que está "a tiempo" de actuar con Juan Pedro y aseguró que intentará "por todos los medios que esta persona pueda acercarse a su peso ideal". "Es un proceso (de estabilización) que llevará tiempo (seis meses). Y también buscaremos que a la vez vaya superando todas sus patologías", señaló.

"Esto no es vida, es la peor condena que le pueden poner a un ser humano, hacer de su cuerpo su prisión", comentó Juan Pedro, desde su casa de Aguascalientes.