Un hombre con una máscara que simulaba un monitor de ordenador de tubo repartió la semana pasada una cincuentena de televisores viejos en un vecindario de Estados Unidos.

El extraño repartidor cumplió su tarea metódicamente e incluso saludó a la cámaras de vigilancia que captaron su imagen. Llevaba traje completo, botas de bicicleta y guantes negros, para evitar dejar huellas.

El hombre repartió hasta 50 televisores de 13 pulgadas y de tubo en cada una de las casas del barrio, el condado de Henrico, en el estado de Virginia (EEUU).

El temor a que el inesperado envío ocultara algún tipo de desagradable sorpresa hizo que los vecinos llamaran a la policía, que fue retirando los monitores de los porches de las casas.

Según una cadena de televisión local, el 23 de agosto del 2018, en la misma zona un desconocido dejó en varias puertas del vecindario hasta 20 monitores de televisión similares a los que aparecieron esta semana. Tampoco entonces pudo localizarse al repartidor de monitores.