Los 200 vecinos de Villaconejos (Madrid) impidieron ayer que los bomberos pudieran acceder a una casa incendiada con ánimo de venganza. Fuentes de la Guardia Civil explicaron que el motivo del fuego intencionado, cuya autoría se desconoce por el momento, se encuentra en una reyerta protagonizada horas antes por un miembro de la familia amenazada, que fue detenido. Se trata de un "delincuente habitual", en palabras de la Guardia Civil, con numerosos antecedentes.
Todos los servicios de emergencia se activaron tras recibir una llamada que alertaba de que los moradores de una vivienda situada a un kilómetro y medio del centro de la localidad estaban recibiendo amenazas de agresión.
En el primer contacto telefónico, los amenazados ya hablaban de que pretendían quemar su casa. Los primeros en llegar al lugar de los hechos fue la Guardia Civil que, con estupefacción, comprobaron el bloqueo al paso ejercido por dos centenares de personas. Un bloqueo que se mantuvo, sin ningún miramiento, cuando llegaron los bomberos 40 minutos.
