El Hospital Virgen de las Nieves de Granada ha implantado un marcapasos a una niña de un día de vida y un kilo y medio de peso en lo que supone la primera intervención de estas características practicada en España en un bebé de tan corta edad y tan bajo peso. Abdo Abdallah, cirujano cardiovascular del hospital, ha explicado que a la niña, que fue intervenida hace una semana y ha recibido ya el alta, le fue diagnosticado un bloqueo auriculoventricular completo con bradicardia severa cuando la madre, embarazada de gemelos, llevaba 32 semanas de gestación. Esa enfermedad, incompatible con la vida, solo podía ser afrontada con la implantación de un marcapasos que permitiera al bebé que su corazón latiera al ritmo necesario (a 100 o 120 latidos por minuto frente a los 35 a los que lo hacía por su patología). La recién nacida, cuyo hermano gemelo nació "perfectamente sano", padece además una cardiopatía congénita grave, aunque más frecuente, que también le fue detectada mediante diagnóstico intrauterino y que requerirá de una nueva intervención quirúrgica cuando la niña crezca, aproximadamente dentro de un año, según el cardiólogo. Para llevar a cabo la implantación del marcapasos, que avanza hoy el diario Ideal, el equipo médico provocó el parto mediante cesárea justo al término del embarazo, lo que permitió practicar la cirugía "al momento de nacer". Este tipo de intervenciones ha sido practicada en numerosas ocasiones en todo el mundo, pero lo que la convierte en pionera en España es la corta edad y el bajo peso de la paciente, según Abdallah, quien ha explicado que la intervención duró 50 minutos que fueron "muy tensos" para el equipo médico. "Lo que se le ha hecho era un paso imprescindible", ha dicho el cardiólogo, quien ha explicado que la niña evoluciona bien de la intervención, por la que solo estuvo ingresada unos días. El equipo de cardiólogos del Hospital Virgen de las Nieves de Granada también fue pionero hace cuatro años cuando en el 2007 implantó, por primera vez en Europa, un desfibrilador automático (DAI) a un bebé de 56 días después de que le fuera diagnosticada una patología cardíaca cuando se encontraba en el útero de su madre. En aquella ocasión, la principal novedad de la intervención radicó en que el DAI, que detecta posibles arritmias y trata de corregirlas mediante una descarga eléctrica, se introdujo por debajo del esternón y no fue enclavado en ninguna estructura cardíaca.