La presunta estafa por implantar prótesis mamarias de calidad inferior a las ofertadas en diversas clínicas de la empresa Corporación Dermoestética llegará a los juzgados. Así lo ha ordenado la Fiscalía de Valencia después de investigar la denuncia de Jaume Serra, un cirujano plástico que dejó de trabajar para la firma al descubrir que las prótesis que utilizaba en la operaciones de aumento de pecho eran de una marca diferente, más barata y de inferior calidad, de la que las pacientes habían pagado.

La fiscalía ha detectado un presunto delito de estafa continuada y por eso ha ordenado la imputación de los responsables de Corporación Dermoestética y el traslado de la denuncia a un juzgado de lo penal. De momento existen 24 casos acreditados en las clínicas de Valencia, Castellón y Albacete, pero los indicios apuntan a que podrían superar el centenar.

Serra decidió acudir a la justicia tras reoperar a una paciente intervenida por otro cirujano y ver que el implante que llevaba, de la marca Sebbin, no coincidía con el que constaba en la factura, el más caro, de McGhan.