El incendio ocurrido ayer en el teatro Alcázar de la capital ha sido extinguido, aunque en el lugar permanecían al cierre de esta edición varias dotaciones de bomberos y dos camiones autobomba refrescando el edificio, en el que no se representará este fin de semana ninguna función.

Así lo confirmaron a Efe fuentes de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, que indicaron que pese a la extinción varias dotaciones siguirían en el lugar apuntalando las zonas más afectadas y refrescando la cubierta del teatro Alcázar, ahora conocido como teatro Cofidis.

LOS EFECTIVOS DESPLAZADOS El delegado de Emergencias y Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Enrique Núñez, aseguró a los medios de comunicación que más de 20 dotaciones de bomberos trabajaron en sofocar el incendio, cuyas causas aún se desconocen y que provocó una intensa columna de humo visible desde diversas zonas.

Enrique Núñez explicó también en el momento en el que se originó el fuego, poco después de las diez de la mañana y que fue extinguido unas tres horas más tarde, se estaba celebrando un ensayo de una función infantil a la que asistían niños que rápidamente fueron desalojados sin problemas, ya que el fuego no afectó a la zona de representación.

El delegado municipal señaló que el edificio tiene "mucha carga de fuego", es decir, cuenta con materiales de fácil propagación y aseguró que en todo momento se veló por la integridad de las personas, en especial de los bomberos.

Fuentes municipales indicaron a Efe que la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, de viaje en Lausana (Suiza) para presentar la candidatura de la capital a los Juegos Olímpicos de 2020 ante la asamblea de la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales (ANOC) estuvo en permanente contacto con Núñez sobre el desarrollo del incendio.

Los servicios sanitarios, que instalaron una pequeña carpa, atendieron a dos personas heridas de carácter muy leve por inhalación de humo y a cuatro bomberos, también leves.

Por su parte, el director de la compañía Rakatá, Rodrigo Arribas, que se encontraba en las instalaciones del teatro donde se representa la obra Enrique VII informó a Efe de que el incendio no afectó a plantas inferiores y "ni mucho menos al teatro". Con todo, han decidido suspender la obra durante el fin de semana por la "afectación del humo", y evitar así problemas.

LUGAR DE TRAGEDIA Precisamente en los bajos del teatro Alcázar se ubicaba la discoteca Alcalá 20, en la que el 17 de diciembre de 1983 un cortocircuito provocó un incendio en el que hubo ochenta y dos muertos, la mayoría jóvenes.