La sociedad española tiene que dar respuesta a las nuevas necesidades sociales que existen en los hogares, "es decir personas con alzehimer, con graves problemas de movilidad, muy unidos en gran medida al envejecimiento", según indicó ayer el director general del IMSERSO, Angel Rodríguez, que participó en el curso de verano El derecho a ser autónomos e independientes: la protección de la dependencia como una garantía , organizado por la Uex y la Fundación Academia Europea de Yuste, que está siendo impartido en el cenobio verato.

A estos problemas hay que añadir otros derivados de accidentes o enfermedades degenerativas, cuyos pacientes, "también recaban de la sociedad y de los poderes públicos, prestaciones y programas específicos".

Por otra parte se mostró partidario de responder a estas nuevas necesidades, "incrementando la calidad y la cantidad de los servicios sociales", especialmente ayuda a domicilio, teleasistencia, centros de día y residencias, "lo que supone el yacimiento de empleo más importante que tiene nuestra sociedad".

Por último adelantó que la Ley de protección de las personas con dependencia entrará en el parlamento el próximo año.