Con cuatro puntos más que la candidatura de Ascó (Tarragona), el municipio valenciano de Zarra fue el mejor posicionado en el informe técnico dado a conocer por el Gobierno el pasado 17 de septiembre.

El Gobierno de Francisco Camps ha mantenido una postura poco definida respecto a la ubicación del ATC. Si a principios del 2010, con la aprobación de la convocatoria para escoger el emplazamiento del almacén todavía fresca, su portavoz, Paula Sánchez de León, alababa la "solidaridad" del municipio al ofrecerse para albergarlo, con el paso de los meses se fue tejiendo un tibio discurso de oposición a través de la vía institucional, pero con una escasa presencia de Camps.

Mientras el resto de presidentes autonómicos se posicionaban sin ambages sobre si querían o no el silo nuclear, hizo falta que miembros de la Plataforma contra el ATC en Zarra afiliados al PP rompiesen sus carnets del partido ante las puertas de la Generalitat (llevaban varias semanas concentrándose sin obtener respuesta) para que Camps pronunciara claramente una negativa. Lo hizo en un almuerzo del PP de Ayora (localidad próxima a Zarra) celebrado el pasado 11 de diciembre, en el que el presidente de la Generalitat valenciana se presentó por sorpresa y acompañado por una cámara de Canal 9.

TRABAJO La oposición, socialistas incluidos, rechaza el almacén, pero lo cierto es que con el cese de María Teresa Fernández de la Vega como vicepresidenta del Gobierno Zarra se libró de uno de los principales opositores al ATC en la localidad. Lo reconocen tanto los contrarios al silo como aquellos que quieren que este se quede en la Comunidad Valenciana. La voz mayoritaria en el pueblo es favorable al almacén. Piensan que traerá trabajo a la zona.