Miguel Montes Neiro, considerado el preso común más antiguo de España al sumar desde 1976 una veintena de condenas, ha iniciado hoy en la cárcel de Huelva, donde está internado, una huelga de hambre indefinida tras no haber prosperado las gestiones realizadas para su puesta en libertad. Así lo ha confirmado a Efe, su letrado, Félix Ángel Martín, quien ha indicado que su cliente ya había advertido de que adoptaría esta medida si no salía de la cárcel al cumplir los 61 años, algo que ocurrió el sábado. Asimismo, ha apuntado que Montes le ha manifestado en varias ocasiones que "o lo dejan en libertad o lo sacan muerto" de la cárcel, ya que, en estos momentos, "no entiende después de todos los años de pena cumplidos cómo no lo dejan libre". El abogado ha advertido de lo extremo y lo "peligroso" de esta decisión ya que esta persona "no está bien de salud", ha sufrido en los últimos años varias intervenciones quirúrgicas que se suman a su precario estado de salud -padece hepatitis C y tuberculosis-. Montes no saldrá de la cárcel hasta 2021, cuando debería haber sido puesto en libertad en 1994, según su abogado, quien ha explicado que ya ha tramitado la petición de indulto, después de que el Tribunal Supremo estimara recientemente el recurso del preso y anulara el auto de la Audiencia de Granada que denegó que fueran acumuladas sus condenas para que dicte otro más claro y así poder decidir sobre su excarcelación. El Supremo concluyó que para poder resolver este recurso se hace necesario que en el auto recurrido consten con la debida claridad la solicitud de refundición que se insta. La última de las penas le fue impuesta el pasado enero por el juzgado de lo Penal número 4 de Granada, que le condenó a seis meses de cárcel por fugarse al aprovechar un permiso que se le otorgó para asistir al velatorio de su madre.