El secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Manuel Sánchez-Fornet, confirmó ayer que los primeros 99 inmigrantes repatriados desde Canarias a Senegal viajaron esposados y sin saber dónde iban, aunque afirmó que se hizo así para evitar acabar "con policías e inmigrantes heridos".

En declaraciones a Efe, Sánchez-Fornet defendió esta actuación policial y aseguró que los que subieron al avión, con grilletes en las manos, "no plantearon el más mínimo problema" y añadió que durante todo el vuelo tampoco hubo "incidentes".

"Hubo un respeto escrupuloso de los derechos de los inmigrantes", explicó el portavoz, quien agregó que "informarles de que se les va a repatriar no es un derecho que esté en ninguna legislación que haya que cumplir".