¿Cuánto tiempo puede durar la inmunidad al coronavirus? Años, tal vez incluso décadas, según un nuevo estudio, la respuesta más esperanzadora hasta el momento a una pregunta que ha ensombrecido los planes de vacunación generalizada.

El estudio apunta a que ocho meses después de la infección, muchos de los infectados mantienen suficiente carga inmune para evitar un nuevo contagio posiblemente durante años. Una de las autoras del estudio, Shane Crotty, señala en 'The New York Times' que "la dosis de inmunidad identificada puede evitar a la mayoría de la gente caer gravemente enferma o ser hospitalizada".

Los hallazgos de este estudio aportan una dosis de tranquilidad a los inmunólogos que temen que la vacunación deba ser recurrente para evitar nuevos contagios. Saber que el colchón de inmunidad perdura, aporta margen de maniobra ante la pandemia.

La investigación del Instituto de Inmunología de La Jolla (California) y la escuela de medicina del Monte Sinaí de Nueva York, no ha sido revisada por la comunidad científica, pero es el estudio más completo y de mayor alcance sobre la memoria inmune al coronavirus hasta la fecha. Incorpora mediciones de cuatro tipos de respuesta inmunitaria: anticuerpos IgG, células B de memoria (que recuerdan el patógeno y pueden responder rápidamente con anticuerpos ante una reinfección) y dos tipos de células T que acaban con otras células infectadas. El objetivo era analizar la respuesta inmune en su conjunto.

Este elemento se une a otro recientemente conocido: los supervivientes de otros SARS provocados por otros virus mantienen su inmunidad hasta 17 años después. La investigación del equipo de La Jolla y Monte Sinaí concuerda con otro recientemente publicado por la Universidad de Washington que señalaba un horizonte de al menos tres meses de inmunidad entre los supervivientes del SARS-Cov2.

Todos estos estudios muestran un patrón común: una vez pasada la fase más virulenta de la enfermedad, y tras superar unas semanas críticas, la respuesta inmunológica parece bastante convencional.

El estudio matiza que un número pequeño de contagiados no mostró una respuesta inmunitaria duradera, tal vez porque la diferencia de carga vírica a la que se vieron expuestos sus cuerpos. La futura vacuna puede compensar este tipo de deficiencia inmunitaria, según explica a 'The New York Times' la inmunóloga Jennifer Gommerman, de la Universidad de Toronto.

Para realizar este estudio, el equipo médico reclutó a 185 hombres y mujeres, de 19 a 81 años, que se habían recuperado de covid-19. Casi todos presentaban síntomas leves que no requerían hospitalización. La mayoría proporcionó solo una muestra de sangre, pero 38 proporcionaron múltiples muestras durante muchos meses.