En la isla de Jersey, conocida internacionalmente como un paraíso fiscal en el canal de la Mancha, han comenzado a salir a la luz secretos que nada tienen que ver con las cuentas bancarias. En Haut Garenne, una enorme mansión victoriana que fue durante décadas escuela y orfanato, la policía ha encontrado enterrados bajo el suelo de la casa los restos de un menor, cuyo sexo e identidad no han sido identificados. Los perros que detectaron por el olfato la presencia del cadáver han localizado otros seis puntos más, que están siendo excavados y en los que podrían hallarse nuevos cuerpos. A los investigadores les ha llamado especial atención la bodega, que en 1986 dejó de usarse.