El interventor Antonio Martín Marugán fue el autor de la llamada telefónica que el maquinista del Alvia recibió apenas dos minutos antes de descarrilar, según ha declarado el propio maquinista, Francisco José Garzón Amo voluntariamente ante el juez. La llamada se realizó al móvil corporativo que llevaba encima, que todavía no ha sido localizado, y desde otro móvil corporativo de la misma compañía. Es decir, de Renfe.

El autor de la llamada, que no dura más de dos minutos y en la que el interlocutor pregunta al maquinista "¿Cómo vas?" y Francisco José Garzón Amo responde que muy bien "a punto de entrar", viajaba en el interior del mismo tren siniestrado, según fuentes de la investigación. En el momento del accidente viajaban en el tren el interventor, que en su declaración a la policía no dijo nada de haber hablado por móvil con el maquinista, el segundo maquinista, que tampoco hizo referencia alguna a esta llamada, y otros dos azafatos de Renfe, que eran pareja, y fallecieron en el acto. Además de un vigilante de seguridad de la empresa Prosegur.

En relación a los motivos que llevaron el domingo al maquinista a ocultar al juez Luis Aláiz que estaba atendiendo una llamada en el momento de descarrilar, fuentes familiares de Garzón señalaron ayer que su única intención fue proteger a su compañero. "No quería hacer daño a más gente",