La desaparición de 3,2 gramos de cocaína que había sido decomisada por agentes de la Policía Local de Mataró ha vuelto poner el foco en un cuerpo policial protagonista de distintas polémicas en los últimos meses y que ha llevado a una investigación por parte del propio cuerpo.

Según ha adelantado La Vanguardia y han confirmado desde el gobierno municipal, el 13 de agosto de 2020, hubo una detención por “resistencia y desobediencia a la autoridad” que tuvo lugar en la ronda de Alfons X El Savi, y en la que agentes de la Policía Local intervinieron 3,2 gramos de “una sustancia blanca, presuntamente cocaína”.

Desde el Ayuntamiento señalan que la Unidad de Atención al Ciudadano (UAC) de la Policía Local tramitó las diligencias de la detención y de la confiscación de la sustancia intervenida. Sin embargo, este 14 de enero, en el proceso de preparación del juicio por la causa que motivó la detención, la abogada del Ayuntamiento constató que el acta de aprehensión y la sustancia que constaban en el expediente “no fueron tramitadas por no haber sido localizadas en el archivo donde se custodian”, relatan desde el consistorio.

Una vez requisada en la actuación policial, se realiza el acta de aprehensión por la sustancia encontrada, se adjunta la sustancia, ésta pasa a los inspectores que corresponda y, después, se debe trasladar a los Mossos d’Esquadra, pero que este último paso no se realizó, explican desde el consistorio, y es aquí donde desaparece la supuesta cocaína, que nunca llegó a analizarse. Así, la concejala de seguridad del Ayuntamiento de Mataró, Anna Villarreal, señala que, el mismo 14 de enero, el jefe de la Policía Local inició una investigación y que pidió informes de todos los implicados para “determinar si ha habido algún tipo de irresponsabilidad o algún tipo de negligencia”.

Así, Villarreal reitera que la supuesta cocaína “no ha desparecido del depósito de la Policía Local”, sino que esta sustancia se debería haber trasladado a Mossos. “Lo que nosotros hemos constatado es que este traspaso no se realizó, pero sí que llegó a entrar a dependencias policiales, porque, en el transcurso de la detención, se constató que había la sustancia, se hizo el acta y se adjuntó al acta”, asevera Villareal.

Dirimir responsabilidades

Desde el Ayuntamiento afirman que es "la primera vez que se tiene constancia de unos hechos de estas características” y que ahora se están completando los informes preliminares, a partir de los cuales el jefe de la Policía Local elevará el informe sobre la idoneidad de abrir un expediente disciplinario “de carácter reservado” para dirimir las responsabilidades de los implicados, la modificación o revisión de los protocolos de custodia o el archivo de las actuaciones.

Villarreal también ha remarcado que la desaparición de la sustancia no tiene efectos en el procedimiento penal, ya que se trata de un procedimiento por desobediencia y resistencia y no hay un delito contra la salud pública, dado que no se llegó a constatar que fuera cocaína y que la cantidad decomisada era pequeña.