Angelina Jolie está de morros. Y eso, en el caso de una actriz famosa en todo el globo por el volumen de sus labios, quiere decir que está muy enfadada. A la protagonista de Tomb raider le duele que la gente piense que ella practica la caza del marido ajeno. Jolie (en la foto, la semana pasada, en Londres) ha negado ser la causa de la ruptura matrimonial de Brad Pitt y Jennifer Aniston, desmintiendo así los rumores que apuntaban a un idilio con el actor, según publicó ayer el diario británico Sunday Express. "Me han acusado de ser una destructora de matrimonios, pero lo único que he sido para Brad es un hombro sobre el que llorar", confió la hija del actor Jon Voight a una amiga íntima. La actriz, que recientemente ha rodado junto a Pitt la película El señor y la señora Smith, aseguró además que lo único que ha hecho es "ayudar" al actor en un momento muy difícil para él.
Tal y como apuntan fuentes cercanas a Jolie citadas por el Sunday Express, la popular intérprete de la película Alejandro Magno asegura: "Ni me acuesto ni me acostaré nunca con un hombre casado".
´STRIPPER´ SINCERA "A todas las famosas nos hacen ofertas indecentes", afirma Susana Reche esta semana en Interviú, revista que llena su portada con sus curvas. La exstripper (foto), retirada de la TV para dedicarse a sus espectáculos, dice que a las mujeres conocidas no les faltan ofertas para ejercer la prostitución de lujo. "A mí misma me lo ofrecieron al comienzo de salir en Crónicas Marcianas, pero lo desestimé", dice.
DIVA EN APUROS La actriz Catherine Deneuve (en la foto) rectificó su testimonio inicial ante la justicia francesa y reconoció haber recibido dinero del millonario argelino Rafic Khalifa por asistir a diversos actos, según publicó ayer la prensa francesa. Testificó por segunda vez el pasado viernes ante la brigada financiera que investiga un presunto caso de blanqueo de dinero en la quiebra del grupo del millonario argelino. El pasado día 5, en una primera audición ante la justicia como testigo, Deneuve negó haber cobrado por asistir en el 2002 a dos actos organizados por Khalifa .
GUARDIA BAJA Anna Kournikova pasaba unos días de descanso a bordo de un yate junto a la isla caribeña de San Bartolomé. En un determinado momento, decidió disfrutar de la tranquilidad de la playa. Allí, Kournikova se acomodó el bikini con tanta naturalidad que el objetivo fotográfico captó lo nunca visto hasta ahora de la tenista y novia de Enrique Iglesias. La foto la publica hoy Interviú.
