El diestro placentino Juan Mora volvió ayer a España después del gran triunfo cosechado en Manizales el 6 de enero, pero volverá a Colombia a reemplazar a José Mari Manzanares el 12 de febrero en la plaza de toros de Medellín en la que alternará con el colombiano Pepe Manrique y con Sebastián Castella con toros de César Rincón.

El torero que cuenta ya 28 años como matador de toros, escoge las palabras al hablar. Medita cada cosa que dice y sus respuestas llevan profundidad.

Tras ocho años toreando poco, o casi nada, se ha convertido en la gran novedad de cara a la temporada 2011, a raíz de su gran triunfo en Madrid en octubre.

Mora, que debutó en Manizales hace 23 años, reflexiona sobre la dureza de su profesión y los años que estuvo de parada obligada. "Han sido unos años relegado a una categoría de proscrito, ahí me aferré a unos valores que me inculcó mi padre, como la paciencia y la perseverancia, y no me rendí".

Por lo pronto reaparecerá en España en la plaza de Vista Alegre de Madrid el 27 de febrero, y luego tiene cerradas dos corridas en La Ventas. Una, en San Isidro, alternando con El Juli, y la otra en la corrida de Beneficencia con Morante de la Puebla. Luego seguirán ferias de categoría y una media de 30 corridas de toros.

"Estaré donde tenga que estar, para mi no son los números, el toreo es de letra, escribir con mi capote y muleta mi sentimiento", dice Mora con una humildad auténtica, labrada a golpes de sacrificio tras años de lidiar con el toro del olvido. "A mí me gustaría llevar mi toreo a muchas plazas, pero tampoco es cuestión de ponerse a torear sin orden ni concierto".

Al cabo de años de profesión, cuando la mayoría de toreros de su generación han optado ya por el retiro, Mora mantiene una ilusión real: "Lo que me lleva a seguir toreando es lo espiritual. Aquí no se acaba de aprender todo, se van limando aristas, trato de ser cada vez más natural y me he ido soltando y encontrando mi propia personalidad, soltándome para mejorar mi toreo. Por eso sigo ahí".

Llegada la hora de iniciar la temporada española, Juan Mora reafirma sus convicciones con pleno respeto a sus compañeros de profesión. "Me gusta hacer el paseillo con todos, pero Morante es un intérprete genial y me espolea estar cerca de él".