El periplo judicial de Juana Rivas, la madre granadina condenada cinco años de cárcel por sustracción de menores tras no devolver a sus hijos con su expareja, sigue sumando decisiones en su contra. A punto de que expiren las vacaciones estivales de los niños en España este próximo jueves, la Audiencia de Granada ha confirmado la falta de competencia de los tribunales españoles para instruir la última denuncia por malos tratos de su exmarido a los menores que la madre interpuso a finales de julio, por lo que mañana deberán regresar con su padre. En la denuncia, archivada ya en primera instancia, Rivas solicitaba medidas cautelares para proteger a los pequeños, entre ellos que se evitara que volvieran a Italia, pero el tribunal defiende que se trata de una petición inusitada que no puede atender precisamente por esa falta de jurisdicción.

El recurso contra el archivo de esa denuncia era una de las últimas opciones que le quedaban a Rivas para retener en España a sus hijos, que ahora tienen 13 y 5 años y cuya custodia un juez italiano concedió al padre el pasado mes de marzo, arremetiendo de paso contra las habilidades maternales de su progenitora. En los últimos días, la madre granadina ha tratado de que su caso no caiga en el olvido y ha remitido diversas misivas y peticiones a las administraciones central y regional para que asuman la tutela de los niños y evitar que vuelen a Italia, pidiendo incluso que sean ingresados en un centro de menores. Argumenta para ello un parte médico de Italia donde se establece la sospecha de maltrato como causa de un ingreso hospitalario, e insiste en que hay un riesgo grave para su integridad física y psicológica si regresan con su padre, Francesco Arcuri, según consta en un informe clínico elaborado por los servicios de salud mental de un hospital de Granada.

NIÑOS CON PESADILLAS

Los chicos habían llegado a ese departamento derivados de un pediatra del sistema andaluz de salud al que su madre los llevó para poner fin a las pesadillas y los problemas para dormir que presentaban. La psicóloga que los atendió y dictó el informe no solo puso en marcha de oficio el protocolo para un posible caso de malos tratos a menores, sino que trasladó la información a la Fiscalía de Menores ese mismo mes de julio.

Es con ese informe en la mano con el que Rivas presentó el pasado mes de julio una nueva denuncia en España contra Arcuri, la novena, acusándole de supuestos delitos de maltrato, lesiones y amenazas de muerte hacia los menores. Pero esta denuncia fue archivada el 2 de agosto al entender el juez que la causa se debería tramitar en Carloforte, la ciudad donde supuestamente se habrían producido esas agresiones. Nada se dijo entonces de esos informes psicológicos de los menores, como destaca su defensa.

Ahora, la Audiencia de Granada confirma ese archivo en un auto contra el que no cabe recurso, por lo que descarta ordenar las medidas cautelares solicitadas por Rivas para que sus hijos permanezcan en territorio español. En un auto dictado este lunes, la Audiencia señala que la propia madre admite en su denuncia la falta de jurisdicción de los jueces y tribunales españoles al señalar como responsable a su exmarido y padre de los chicos, de nacionalidad italiana y residente en su país de origen, y reconocer que las supuestas agresiones se habrían producido en la localidad de Carloforte, donde los niños residen bajo la custodia del progenitor. Así, considera la petición de medidas cautelares una pretensión inusitada que, vaya por delante, nunca podría ser estimada al exceder manifiestamente de las funciones que corresponden a un tribunal de apelación.

LOS SERVICIOS SOCIALES ESTUDIAN EL CASO

El abogado de Rivas subraya que hará todo lo posible por conseguir protección para los niños, y reprocha que una vez más el fallo de la Audiencia Provincial no menciona, ni en un solo párrafo, los informes del sistema sanitario público español que alertan de una situación de riesgo y que ya han sido trasladados a los abogados de Rivas en Italia. Lo dramático de esta situación es que no se haga nada en España para ayudar a estos niños, insiste. Desde la defensa del padre, Francesco Arcuri, ya señalaron que estos procedimientos y peticiones son parte de la estrategia de defensa de Rivas de cara a un posible indulto, lamentando el daño que se pueda estar haciendo a los niños.

Tras este varapalo judicial, que se suma al archivo que la justicia italiana ha hecho de las hasta ocho denuncias por malos tratos presentadas por Rivas contra Arcuri, la pelota está ahora en los servicios de Protección de Menores de la Junta de Andalucía en Granada, que están estudiando la solicitud para la tutela e ingreso en un centro de acogida a raíz del informe médico. Fuentes consultadas por la Agencia Efe han explicado que este caso se trata con todas las precauciones que se toman cuando hay procesos que afectan a la situación de menores. Tras adoptar una decisión, la resolución será trasladada a la progenitora.