El juez Eduardo López-Palop, que investiga el caso Madrid Arena, ha denunciado en el Juzgado de guardia la agresión que sufrió el pasado miércoles en los Juzgados de Plaza de Castilla por un detenido para el que acababa de decretar prisión, que lo golpeó, aunque no le causó lesiones de gravedad.

Así lo ha expresado a Efe el juez decano de Madrid, José Luis González Armengol, quien ha señalado que este incidente no se ha debido a ningún problema de seguridad del edificio ni a ninguna "irregularidad" por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

González Armengol ha indicado que, en los calabozos, en veinticinco años de funcionamiento, es la primera vez que se ha producido un incidente de este tipo.

Los hechos ocurrieron en el departamento penitenciario, que está atendido por funcionarios de Prisiones, cuando el detenido, media hora después de que se le tomara declaración, al ir a sacar a otro arrestado, se escapó de una de las celdas y fue al despacho del juez.

Todo sucedió dentro de las dependencias de calabozos, donde todo está cerrado y con rejas, ha precisado el juez decano de Madrid, quien ha resaltado que el detenido no se fugó ni se movió dentro del edificio de los Juzgados.

Para González Armengol, no hubo ninguna irregularidad en la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que se encargan de la custodia de las dependencias judiciales.

Ha explicado que en el quehacer diario de los Juzgados hay riesgo porque hay detenidos, presos y gente que acude "angustiada y alterada", por lo que se toman medidas de seguridad con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Policía Municipal y seguridad privada.

El juez decano de Madrid ha opinado que no hay que tomar ninguna medida de seguridad adicional en los Juzgados de Plaza de Castilla, aunque ha reconocido que es posible que con unos edificios más modernos, con una zona de aislamiento para cada uno de los detenidos, se pudiera mitigar el riesgo.

La agresión al juez López-Palop es "un hecho puntual que afortunadamente nunca había pasado y existen muy pocas posibilidades de que se vuelva a producir", ha recalcado González Armengol.