El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) ha decidido levantar el secreto de sumario que hasta ahora pesaba sobre la causa judicial iniciada a cuenta del fallecimiento de los tres miembros de una misma familia en su vivienda de la localidad sevillana a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria que desde un principio se atribuyó a una toxiinfección alimentaria.
Según fuentes del caso, el juzgado habría resuelto así atender al requerimiento de la Fiscalía, que consideraba que el secreto sumarial no era necesario al no haber riesgo de que la investigación quedara obstaculizada si el mismo se levantaba.
Las pesquisas realizadas apuntan a que los alimentos encontrados en el domicilio de la familia no habrían superado su periodo de caducidad. Asimismo, no existiría constancia de ningún tipo de antecedente de conflicto familiar; se trabaja en base a posibilidades como el consumo de comida en mal estado o la ingestión accidental de algún tipo de toxina.
Esperar a análisis derivados de la autopsia
La menor superviviente, de 13 años continúa hospitalizada pero ha pasado a planta, mientras que la Fiscalía de Protección de Menores ha recibido las diligencias en orden a iniciar estudios sobre los familiares que podrían hacerse cargo de la custodia de la misma.
Las víctimas murieron a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria cuya causa se desconoce, por lo que se está pendiente de una serie de pruebas "complementarias" que se realizarán a partir de ahora, tras la autopsia practicada a los tres cadáveres.
