Un juzgado de Sevilla ha dictado auto de apertura de juicio oral contra Ángel Boza, el integrante de La manada que permanece en prisión preventiva por el robo con violencia de unas gafas de sol este pasado verano. En el auto, el juez requiere al joven que deposite una fianza de 594 euros para «asegurar las responsabilidades pecuniarias que pudieran imponérsele» en una eventual sentencia condenatoria, y advierte que de no pagarla le embargarían bienes por esa cantidad. El juicio se celebrará en unos meses.

El auto mantiene que «existe base sólida suficiente para constatar la existencia de indicios racionales de la comisión» de los delitos de robo con violencia e intimidación y lesiones. Asimismo ratifica la decisión de mantener a Boza en la cárcel al no variar las circunstancias para ello: el riesgo de fuga, dada la gravedad del delito al que se enfrenta y sus otras sentencias pendientes, pero también la posible reiteración delictiva. Según reprochó el juez hace unas semanas al rechazar su puesta en libertad, «las condenas anteriores no lograron evitar una nueva conducta delictiva».

El joven ya fue condenado por otros dos delitos contra la seguridad vial en mayo del 2014 y febrero del 2016, meses antes de abusar sexualmente, junto al resto de amigos de La manada, de una chica de 18 años en los Sanfermines. Fuentes judiciales confirmaron que, en su escrito de acusación, la fiscalía de Sevilla solicita para el acusado cuatro años de cárcel por un delito de robo con violencia e intimidación al arrollar con su coche a unos vigilantes en su huida del centro comercial donde sustrajo unas gafas de sol valoradas en 150 euros el pasado 1 de agosto.