La presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), María Eugenia Alegret, pidió ayer a los Mossos d´Esquadra que tramiten un informe en castellano al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre el comportamiento que adoptó una jueza de instrucción de Barcelona durante un control de alcoholemia preventivo, el pasado 9 de octubre. En una nota informativa interna redactada por la división de tráfico de los Mossos se detalla cómo la magistrada amenazó a los agentes e intentó negarse a realizar la prueba, que finalmente hizo con un resultado de 0,48 miligramos.

La magistrada acudió ayer a los juzgados a trabajar, pero evitó coincidir con los periodistas. Los hechos fueron revelados ayer por El Mundo . "Soy juez de Barcelona, ¿por qué no me deja ir?", soltó a los agentes que le invitaron a pasar un control de alcoholemia preventivo, a la altura de Sant Cugat, poco después de las tres de la madrugada.

La jueza, según el relato de los hechos realizada por los mossos que intervinieron, pidió no realizar el control porque venía de trabajar y estaba muy cansada. Después les coaccionó con frases del estilo: "Yo por ustedes me salto muchas veces el procedimiento y a partir de ahora no voy a creer nada de sus historias ".

Por lo que se desprende del detallado informe que los agentes hicieron a sus superiores sobre el incidente, la escena fue muy tensa. La magistrada tuvo que soplar hasta en siete ocasiones para poder hacer la prueba con normalidad. En otro momento exigió el TIP (el número de identificación) de todos los mossos que intervenían en el control de alcoholemia. "Quiero los números de todos los agentes y especialmente el suyo", dijo en relación al cabo. Pidió un bolígrafo a los agentes y anotó todos los números de identificación. En otro momento, les dijo: "Estoy deseando que los de tráfico de Sabadell pasen por mi juzgado". Y exigió que le leyeran los derechos en castellano.