Kate Moss ha tomado dos medidas imprescindibles para salvar su carrera tras ser filmada esnifando coca. La top model ha dejado a su novio, el rockero heroinómano Pete Doherty, y ha ingresado en una lujosa clínica de rehabilitación. El pasado sábado Moss aterrizó en un jet privado en el estado norteamericano de Arizona y fue trasladada en limusina a la clínica Meadows, en Phoenix, donde pasará un mes recibiendo tratamiento médico y terapia intensiva.

La clínica es lo más de lo más. A ella acuden cantantes, actores, deportistas y otras celebridades con problemas de depresión, alcoholismo y adicciones varias.

La nueva paciente de la clínica va a compartir habitación con otras dos mujeres y deberá pagar 3.300 euros diarios, que es la tarifa de está clínica perdida lejos del mundanal ruido, en el hermoso paisaje del desierto de Sonora.

La modelo, que ya pasó hace años un par de meses en otra clínica similar, no podrá ver a su hija, Lila Grace, ni dispondrá de un simple teléfono móvil para hablar con familiares y amigos. Además de las sesiones individuales con un equipo de psicólogos, consejeros y enfermeras, Kate deberá participar en sesiones de terapia de grupo.

VILLANA DE CINE La próxima vez que Jodie Foster se monte en un avión puede dar por seguro que va a encontrarse con turbulencias. Flightplan , la última película que ha protagonizado, ha revuelto el mundo de las azafatas. Los tres sindicatos mayoritarios de auxiliares de vuelo han pedido el boicot del filme de Disney, que debutó como reino de la taquilla.

Para entender semejante enfado hay que explicar algo que desvela parte de la trama: en Flightplan , un thriller basado en la desaparición durante un vuelo de la hija del personaje que interpreta Foster, una de las auxiliares de vuelo es una terrorista, un pecado mortal en EEUU después del 11-S. Para colmo, sus compañeras de plantilla tampoco salen muy bien paradas. "No está mal odiar a los pasajeros", le dice una de ellas a otra azafata tras lanzar una mirada feroz a unos niños que hacen lo que suelen hacer la mayoría de niños en los aviones.

"La descripción es ultrajante, escandalosa", ha dicho Patricia Friend, presidenta de la Asociación Internacional de Auxiliares de Vuelo. "Las azafatas están en la primera línea y ponen sus vidas en juego día tras día por la seguridad de los pasajeros. Demostraremos a Hollywood que esta falta de respeto a nuestra profesión no despegará", dice.

VIUDA EN GUERRA El Tribunal Supremo de EEUU anunció el martes que celebrará una audiencia de apelación solicitada por Anna Nicole Smith para que se le restituya a la exmodelo de Playboy una indemnización judicial de 82 millones de euros procedente de los bienes de su difunto esposo, un anciano multimillonario. La justicia acordó una revisión de un fallo de la Corte de Apelaciones estadounidense, que dio la vuelta a una primera decisión judicial a favor de Smith.

AMOR A ITALIA Carole Bouquet ha anunciado la separación de Gerard Depardieu. La actriz francesa confiesa que se ha separado, entre otras razones, porque el actor "no amaba lo suficiente a Italia". "Nuestra historia de amor terminó, nos separamos. Pero aún nos queremos. Nos conocemos desde hace 20 años, hemos compartido mucho y sigue habiendo muchas cosas en común entre nosotros", dice.