El vicario general de los Legionarios de Cristo, Luis Garza Medina, ha asegurado hoy que la congregación está dispuesta a aceptar "con obediencia" las decisiones del Vaticano, que mañana examinará los informes de los cinco obispos que en los últimos meses han estado inspeccionando la orden.

"Los resultados de la visita apostólica están cubiertos por el secreto pontificio. A día de hoy no existe ninguna comunicación oficial en este sentido. En cualquier caso, aceptaremos con obediencia lo que la Santa Sede nos pida", ha afirmado Garza en declaraciones al diario La Repubblica.

La inspección, que en jerga vaticana se denomina visita apostólica, fue ordenada el año pasado por el papa Benedicto XVI a raíz de los escándalos sexuales relacionados con el fundador de la congregación, Marcial Maciel (1920-2008).

ABUSOS A SEMINARISTAS

Tras años de acusaciones, Maciel fue finalmente sancionado por el Vaticano por abusar de varios seminaristas menores y tener al menos una hija, fruto de una larga relación con una mujer. Además, otros dos hombres afirman ser hijos de la relación que Maciel mantuvo con una segunda mujer.

Después de años de silencio, los Legionarios admitieron los hechos y el Papa decidió llevar a cabo una inspección, que terminó el pasado mes de marzo. Los visitadores presentarán mañana sus informes al Vaticano, que todavía no tomará ninguna medida concreta. Será el Papa quien, "en un segundo momento", decidirá lo que hay que hacer.

Por el momento, los expertos hablan de la posible sustitución de los actuales líderes y el nombramiento de un comisario externo como la mejor solución para reformar la orden tras los escándalos.