El Ministerio de Sanidad británico presentó en agosto un plan para revisar la ley de fecundación humana. Se regularía así la venta de esperma en la red. Empresas británicas ofrecen, a través de internet, muestras de semen y un equipo de inseminación por 600 euros.

Gran Bretaña fue el primer país europeo en dar el visto bueno, en el 2004, a un equipo científico de Newcastle para clonar embriones humanos con fines terapéuticos. Luego nació la oveja Dolly.