Cervantes era un escritor gallego que escribió libros sobre fútbol y se murió hace poco. Su mujer, Marina , sale en la tele siempre enfadada. Tras la guerra civil, hubo dos tendencias, la poesía arraigada y la desarraigada, pero con Franco todo daba igual. Por ejemplo. Eso es lo que entienden nuestros alumnos cuando se nos obliga a explicar la Literatura como una lista de obras o de autores, sin leer apenas, redactando telegramas que no llegan nunca a su destino. Así intentan que expliquemos Literatura. Así nos cargamos la literatura. Generación del 27: Lorca, Alberti, Aleixandre ...como una alineación futbolística. De las jarchas hasta ahora, sin saber que hay otras lenguas en España con literatura propia, sin leer a Cortázar , haciendo hueco entre la sintaxis y el lenguaje jurídico. Primero el sintagma nominal y sus secuaces, y ahora el contexto y la coherencia. Nombres distintos para lo mismo. Y luego partieron a la mitad el número de horas, y unieron la Lengua y la Literatura. Ahora nos llevamos las manos a la cabeza porque nuestros niños no leen. Lo raro es que no salgan huyendo en cuanto vean un libro. Yo lo haría si me hubieran explicado el Barroco en dos líneas, y no hubiera tenido un profesor excelente que hablaba con pasión del 27 no como un derby futbolístico, mientras nos hacía descifrar a Góngora y Quevedo , sin provocarnos ningún trauma. A este paso, en este país de Quijotes, no habrá nadie que tome el relevo de perder la cabeza a causa de la Literatura. Salvo, quizá, nosotros, los profesores de esa asignatura que intenta explicar, a pesar de todo, qué magia increíble encierra la palabra escrita.
