La Embajada de China en Madrid denunció ayer que, a raíz de la expansión del coronavirus por medio mundo, han recibido quejas de compatriotas por trato discriminatorio en España. Aunque, de momento, se trata de «casos aislados», según detalló el encargado de negocios de la institución, Yao Fei. «A nuestros propios hijos, en el colegio, los llaman coronavirus. Pero lo tomamos como bromas de niños», añadió, tras dejar claro que el Gobierno chino está realizando un esfuerzo sin precedentes para combatir una epidemia que, de momento, ha causado la muerte de 425 personas en China (y otras dos fuera de sus fronteras). «El enemigo no somos los chinos, es el coronavirus, que no tiene pasaporte. No existe ninguna razón para ver a todos los ciudadanos de origen asiático como casos sospechosos», insistió.

Respecto al Mobile World Congress de Barcelona, la gran feria de la telefonía móvil que se celebrará del 24 al 27 de febrero, el responsable de la embajada reconoció que aún no disponen de todos los datos de los ciudadanos chinos inscritos, pero que se tomarán «todas las medidas preventivas que sean necesarias».

Yao Fei quiso trasladar principalmente un mensaje de tranquilidad y reconoció que muchos ciudadanos chinos que han regresado a España en los últimos días permanecen de forma voluntaria en cuarentena como medida de precaución. El responsable de la embajada reiteró que China está ofreciendo información transparente para emprender una lucha «histórica y heroica» junto con todos los gobiernos del mundo. El coronavirus, insistió, es «un problema de toda la humanidad y merece un esfuerzo mancomunado». Tras alabar el apoyo que han ofrecido la mayoría de los países, España entre ellos, cargó duramente contra Estados Unidos por aprobar medidas que se han demostrado inútiles -como el veto en las fronteras a los ciudadanos chinos- y dar lugar así un «pánico internacional innecesario», precisó.

El encargado de negocios recordó también que, a pesar de la alarma internacional, la tasa de mortalidad del coronavirus es del 2%, un porcentaje muy inferior al que presenta la gripe común e incluso el síndrome respiratorio agudo SARS. «En Estados Unidos, la gripe común [de esta temporada] ha provocado 6.600 fallecimientos», expuso a modo de ejemplo.

Más controles

También reconoció que el comercio ilegal de animales salvajes -posible foco de la infección- está prohibido en China, pero que este tipo de mercados no están eliminados al 100%. Una vez que se supere la crisis del coronavirus, el Gobierno de su país pondrá en marcha «controles más rigurosos».

Pese a la gravedad internacional que implica la nueva epidemia de gripe que tiene al mundo en alerta, el responsable de la embajada en España hizo, sin embargo, hincapié en que desde el pasado 2 de febrero el número de pacientes que se curan supera al de los que fallecen.