El consorcio asegurador del grupo Lufthansa, matriz de la aerolínea Germanwings, ha reservado 300 millones de dólares (279 millones de euros) para indemnizar a las familias de los pasajeros del vuelo 4U9525, siniestrado el 24 de marzo en los Alpes franceses, según ha informado este martes el diario alemán 'Handelsblatt'.

El rotativo germano explica que el grupo Lufthansa ha provisionado estos fondos para afrontar el pago de las indemnizaciones por los 150 muertos en el trágico vuelo que partió de Barcelona con destino a Düsseldorf y que se estrelló en los Alpes. La cantidad reservada está destinada a afrontar tanto el pago de indemnizaciones a familiares como el derivado de la pérdida del avión, un A320.

El director de Operaciones de Germanwings, Oliver Walter, explicó este lunes en Marsella que la aerolínea pagará a las familias de las víctimas del vuelo 4U9525 una ayuda financiera rápida de 50.000 euros: "Es una ayuda que no supone una deducción de otras indemnizaciones", aseguró.

EL COPILOTO, RESPONSABLE

La Fiscalía de Marsella, encargada de investigar el siniestro, ha responsabilizado al copiloto de la aeronave, Andreas Lubitz, de haber provocado deliberadamente que el aparato se estrellara en una zona montañosa.

Posteriormente, la Fiscalía de Dusseldorf ha confirmado que Lubitz tenía un parte de baja roto en su casa que corresponde al día del vuelo, por lo que no debería haber embarcado en el avión. El joven copiloto, de 27 años de edad, ocultó a su compañía que le habían dado la baja médica.