TLta histórica Machacona acaba de cambiar de propietarios y la plaza Mayor de Cáceres y su entorno dan un paso más hacia la modernización de los negocios. A partir de ya, el histórico local se llamará pub Mayyo y orientará su actividad hacia la juventud con juegos, música y diversión. La Machacona forma parte de la historia menuda de Cáceres. A principios del siglo pasado y durante muchos años, fue la pensión preferida por los serranos que bajaban desde Castilla, Asturias y Cantabria con sus ganados para que pastaran durante el invierno en las dehesas de los alrededores de Cáceres. Entonces no había escalones en la calleja que daba a la plaza Mayor y las yeguas accedían desde los soportales hasta la casa de huéspedes. Los serranos dormían en el zaguán abrigados con recias mantas zamoranas y sus aparejos colgaban de gruesos palitroques clavados en las paredes del vestíbulo. Cuando llegó la democracia, la castiza pensión se convirtió en el epicentro de la movida cacereña y por allí pasó hasta el mismísimo Pedro Almodóvar cuando ya empezaba a despuntar como cineasta.

Con el desencanto, La Machacona se sumergió en tiempos oscuros, acabó convirtiéndose en un bar alegre que gustaba mucho a los viejecitos de los pueblos por la mañana y a los militares sin graduación por las tardes. Ahora, La Machacona quiere resurgir de las cenizas. Para ello, rompe con el pasado más inmediato cambiando de dueño y de nombre e intentará atraer a la juventud que se mueve entre el Berlín y el Luna. Será un retorno a los orígenes.