La supermodelo australiana Elle MacPherson ha ingresado en la clínica Meadows, de Phoenix (Arizona), para desintoxicarse del alcohol, según ha informado la prensa británica. Una depresión posparto y el régimen al que estuvo sometida para perder peso tras dar a luz a su segundo hijo, hace ocho meses, han minado la moral de la top, que recibió en los 90 el apelativo de el Cuerpo. Tras tanta presión, ella, que también es humana, se ha refugiado en el trago.
MacPherson, de 40 años, visitó el pasado mes de agosto Ibiza y allí demostró que, cuando la genética sopla a favor, una mujer puede recuperar la silueta después de un parto a velocidad de vértigo. Pocas semanas después, sin embargo, la modelo faltó a su cita con la semana de la moda de Londres, a la que había prometido asistir, y causó baja en un acto que debía presentar en Melbourne.
La prensa británica afirma también que la decisión de ingresar en una clínica estadounidense en lugar de en la prestigiosa Priority londinense --allí se desintoxicó, por ejemplo, la modelo Kate Moss-- está provocada por la cohorte de paparazzi que hace guardia en sus puertas.
VISITAS DE SU FAMILIA
En la mucho más discreta Meadows, MacPherson (en la fotografía) ha recibido las visitas de su marido, el magnate Arpade Busson, y de sus padres, Peter Gow y Barrister MacPherson.
De momento, no ha habido ningún comunicado oficial, pero la modelo australiana ya ha sido avistada en un restaurante mexicano cercano a la clínica Meadows.
