La madre del niño cuyos restos fueron hallados el martes pasado dentro de una maleta en Menorca declaró a los agentes del Grupo de Homicidios que en la primavera de 2008 halló muerto a su hijo, de nueve años y lo ocultó por miedo.

Sorprendida y asustada por este hallazgo, puso el cuerpo dentro de una maleta, junto con varias pertenencias, y lo abandonó en una zona de monte bajo, muy poco transitada, situada en Binidalí, en la costa sur del municipio de Mahón, según ha declarado a la policía, han indicado a Efe fuentes próximas a la investigación.

Los agentes del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Baleares que han llevado a cabo la investigación del caso, lo han dado por resuelto, una vez identificados los restos cadavéricos y localizada la madre, que ha admitido su participación en los hechos.

Se trata de una mujer de 30 años, que reside en Mahón, tiene trabajo y pareja estable. En el momento de la muerte del niño, era madre soltera y llamaba "sobrino" a quien en realidad era su hijo.

La maleta fue encontrada por dos hermanos que habían ido a buscar leña.