El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha admitido este viernes que se está valorando el cierre de bares y restaurantes para frenar el contagio de coronavirus. "Vamos a tener que adoptar medidas más severas de las que tenemos", ha explicado en una entrevista en Onda Madrid, como forma para evitar desplazamientos innecesarios y concentraciones de personas ante el coronavirus.

Además ha descrito el escenario que vive la capital como "muy difícil y complicado" que además "va variando en el día a día". Por ello ha vuelto a pedir a todos los madrileños que "se queden en casa", pues "es la mejor forma" de prevenir un mayor número de contagios. "Esperemos que sean tres semanas y no sea más tiempo. Depende de todos y cada uno de nosotros, que seamos capaces de dar lo mejor de nosotros mismos", ha lanzado.

Minutos después, en Antena 3, el político del PP también ha tachado de "obvio" que en los próximos dias "habrá un pico elevado que obligará a tomar más medidas".

Además, preguntado sobre si se está llegando tarde al adoptar nuevas restricciones, ha defendido que ésta es "una situación que nos es desconocida absolutamente" y que provoca que en un día se tengan que tomar decisiones diferentes de las que se podían tomar en la jornada anterior.

El primer edil de la capital ha subrayado que una vez que se haya salido de la crisis habrá que "evaluar actuaciones políticas", pero que "en este momento tenemos que primar ir todos unidos a arrimar el hombro".

Preguntado sobre si se debería haber suspendido la manifestación del 8 de marzo por el Día de la Mujer, Martínez-Almeida ha afirmado que "a la vista de los hechos no fue prudente".