Taxistas contentos por la fluidez del tráfico; conductores aplicados (los más) que llevaban su matrícula impar; transporte público con más usuarios; y conductores (los menos) que se saltaron la norma y se dedicaron a insultar a la alcadesa, Manuela Carmena. Así está Madrid, ciudad pionera en España en aplicar una medida drástica e histórica para reducir los niveles de contaminación: prohibir la circulación a la mitad de los coches. Hoy, día 29, solo los vehículos con matrícula impar pueden acceder a la almendra de la ciudad. El consitorio acaba de anunciar que levanta el veto para mañana, día en el que -de haber seguido las restricciones- solo hubieran podido circular los pares (o acabados en cero), y para el sábado, Fin de Año.

CONTROLES EN LOS ACCESOS

Las principales vías de entrada han amanecido inundadas de policías municipales y agentes de movilidad, que vigilaban las matrículas. Cualquier coche con número par (o terminado en cero) con menos de tres ocupantes era denunciado. Fuentes municiaples afirman que en una hora se han tramitado 100 denuncias. No hace falta esperar ni cinco minutos para encontrar algún infractor. “Nuestra obligación es denunciar. Tomamos el número de matrícula y lo pasamos al Ayuntamiento para que gestione la multa [90 euros, 45 si es de pronto pago]”, afirma un agente, ubicado en la Avenida de América, una de las principales arterias que sirve, por ejemplo, para aceder al aeropuerto. Los conductores denunciados son obligados a dar media vuelta y no entrar en la ciudad. “Los infractores nos ponen todas las excusas del mundo, que si no se habían enterado, que si necesitan entrar a la ciudad con urgencia”, añade el municipal, que a los pocos minutos escucha cómo un conductor furibundo grita a pleno pulmón: “Quitad el control. Carmena es tonta”. No es el único. Una conductora, con martícula par, despotrica contra la alcadelsa de Ahora Madrid: “Se ha propuesto fastidiar a todos los que trabajamos. Vengo desde Guadalajara y ahora ¿qué tengo que hacer? ¿Irme? ¿No trabajo hoy? ¿Se está dando cuenta la alcaldesa de lo que nos está haciendo?”

Los controles están activos en las principales entradas, como Avenida de América o Ciudad de Barcelona. Dentro de la ciudad, los agentes de movilidad también tienen mil ojos en las calles, pero parar a los coches infractores -a simple visa se ven unos cuantos- es muy difícil por “motivos de seguridad”, explica un empleado municipal.

El tráfico, en cualquier caso, está más fluido, aunque también hay que tener en cuenta que estamos en plenas fiestas de Navidad y es habitual que descienda.

Madrid es la primera ciudad de España que aplica una medida como esta para tratar de reducir la contaminación, que implica que este 29 de diciembre solo puedan moverse los vehículos con matrícula par por las calles comprendidas dentro de la M-30.

Los únicos vehículos que tienen permitido saltarde la prohibición son los taxis, las motos, aquellos con tarjetas de movilidad reducida que sean conducidos por el titular, los híbridos o eléctricos y los de alta ocupación que transporten a tres o más personas.

A su vez, la Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha reforzado el servicio en un total de 55 líneas de su red, fundamentalmente aquellas que cubren las conexiones entre los distritos de la periferia y la almendra central (perímetro interior de la M-30).