Madrid retoma las misas con público desde este lunes pero con condiciones especiales ante la pandemia de coronavirus, como la apertura únicamente con un tercio del aforo, ha recordado el Arzobispado de Madrid a través de su página web.

A fin de evitar aglomeraciones y garantizar que se respetan las distancias de seguridad, las iglesias van a organizar la apertura y el cierre mientras recomienda, "en caso de ser necesario y posible", el aumento del número de celebraciones.

Los templos mantenían sus puertas abiertas hasta ahora pero la celebración de las mismas había quedado en suspenso para evitar las aglomeraciones y controlar así la expansión de la covid-19.

Las misas volverán a pesar de que la región se mantiene en fase 0 del plan de desconfinamiento. El Arzobispado, con Carlos Osoro al frente, dispensa del precepto dominical atendiendo las pautas fijadas por la Conferencia Episcopal Española y sugiere a personas de riesgo, mayores y enfermos que se queden en casa y sigan las celebraciones por la televisión, la radio o Internet.

Darse la paz sin contacto y comunión, mejor en mano

También va a ser obligatorio que los fieles usen mascarilla, las pilas de agua bendita continuarán vacías y se ofrerá gel desinfectante antes y después. El gesto de darse la paz se sustituirá por uno sin contacto.

La comunión se recomienda en la mano. Se evitarán los coros reduciendo la música a un solo cantor y no se distribuirán hojas parroquiales ni ningún otro objeto. El cestillo de la colecta no se pasará durante el ofertorio sino a la salida de misa.

El Arzobispado ha preparado unos carteles con las medidas clave para que las parroquias puedan colocarlos en sus tablones de anuncios y en sus accesos.