"Lamentables imágenes del daño que hacen unos paneles colocados como barrera para el ruido en Ojén, Andalucía. Parece mentira que hoy en día, la adminsitración pública, que se supone que dispone de técnicos competentes, siga cometiendo atrocidades como ésta. Hagamos que se les caiga la cara de vergüenza. Compartidlo sin dudar".

La publicación a la que refiere da muestra de la masacre de aves en una carretera de Andalucía, donde han situado una barrera para eliminar el sonido de una obra que se ha convertido en una trampa mortal para decenas de mirlos.

Diego narra durante unos minutos la escena que ve en esta carretera. Ya le habían avisado de que se le iba a romper el corazón al verlo, pero quiso acercarse para comprobarlo. "Esto es una verdadera vergüenza", dice una y otra vez durante la escena. "Se me parte el alma, señores. Los pobres pájaros... Hay que ser hijos de puta. Hasta las crías, qué pena".

El ciclista que denuncia esta situación rompe a llorar al ver que los pájaros que coge uno a uno tienen la cabeza reventada. "Esto es de ser muy poco humanos. Tenéis que desmontar al menos las dos o tres que es por donde pasan", dice. "Cómo se me está poniendo el corazón. Vaya masacre".

No es primera hora de la mañana y por tanto, asegura, hay más de los que habría porque los trabajadores de la subcontrata se encargan de limpiarlos "cada dos por tres" porque saben que es un cauce natural por donde pasan los mirlos volando. "Se estrellan contra esta pantalla transparente. Pintarla para que la vean los pájaros, o quitarla. De aquí me voy yo al Seprona. Lo vais a quitar como que me llamo Diego Escalona. Qué barbaridad".

Por último, hace un llamamiento a José Antonio, alcalde de Ojén, para que vaya a la zona y lo vea en primera persona. Y a los ciudadanos, a compartir el vídeo como denuncia.