Con lo que nos han hecho sufrir con el cobro del euro por receta, y ahora lo cortan así, en seco. ¡Vamos dando bandazos!", exclamaba ayer Angeles M., farmacéutica del barrio barcelonés de Poblenou. El enojo de esta farmacéutica era compartido por muchos de sus colegas, que no comprendían el tira y afloja político que, intuían, ha motivado la inminente suspensión del cobro del euro por receta. El Tribunal Constitucional (TC) admitió ayer el recurso que el Gobierno central presentó el pasado mes de diciembre contra el cobro en Cataluña de una tasa por cada medicamento recetado con cargo a la sanidad pública. Esto implicará la suspensión temporal (cinco meses prorrogables) pero inmediata de la tasa, ya que así lo solicitó el Gobierno en su recurso.

El TC notificará oficialmente hoy a la Generalitat este trámite e, inmediatamente, la Consejería de Salud comunicará a las farmacias que en las próximas horas deberán dejar de cobrar el euro por receta a sus clientes. Esto no sucederá de hecho hasta mañana, ya que el Servicio Catalán de la Salud interrumpirá esta próxima noche (prevé hacerlo a las 23 horas) el servicio informático que lo enlaza con las farmacias, momento en que eliminará la tasa. En las pantallas de los farmacéuticos aparecerá valorada en "coste cero". Esta fórmula de interrupción provisional permitiría a la Generalitat reiniciar el cobro si prosperase el recurso que presentará ante el TC contra el presentado por el Gobierno central.

Durante el día de hoy, en consecuencia, las farmacias seguirán cobrando el euro, a pesar de que los ciudadanos ya saben por los medios de comunicación que es un pago en balde. La confusión y el enfado de los usuarios volvió ayer, por todas estas razones, a las farmacias. Muchos farmacéuticos colocaron en la puerta de su establecimiento una nota advirtiendo de que, de momento, "se sigue cobrando" un euro.

El TC dispone de cinco meses para estudiar las alegaciones de las partes, un plazo que puede prorrogar tantas veces como considere conveniente antes de dirimir el caso. En paralelo, el TC tramitará los recursos presentados con posterioridad por el Gobierno y el PSOE contra el euro por receta de Madrid.

En función de lo dicte en su día con carácter definitivo el tribunal, la Generalitat habrá de devolver más adelante, o no, los euros recaudados desde que el Gobierno central interpuso el recurso, hace menos de un mes. "En ningún caso se habrá de devolver lo cobrado antes del recurso --aseguró ayer un portavoz de la consejería--. Como máximo, se reembolsará lo percibido a partir de la apelación al TC".

LO AHORRADO En los seis meses de vigencia de la tasa, la Generalitat ha recaudado 45,7 millones de euros por las recetas dispensadas, cantidad a la que añade otros 110 millones de euros ahorrados en el 2012 en el consumo de fármacos, cifra atribuída al "efecto disuasorio" que ha ejercido en los ciudadanos el hecho de saber que por cada medicamento recetado que se llevan pagan un euro suplementario. "La tasa del euro ha proporcionado 156 millones de ahorro en seis meses de vigencia", resumió Salut.

El aspecto del "efecto disuasorio" en el consumo de medicamentos es percibido como "una incógnita" por los colegios de farmacéuticos. "Habrá que ver si lo que los usuarios han dejado de adquirir son medicamentos que no necesitaban, como se presupone, o si se trata de productos básicos de su tratamiento", advirtió Francesc Pla, vicepresidente del Colegio de Farmacèutics de Barcelona.

Pla se preguntó de qué forma afrontará ahora la Generalitat la escasez económica que afecta al sistema sanitario público. Por esa razón, Salut paga cada mes a este colectivo con un considerable retraso las recetas dispensadas. "La actuación del TC es sorprendente --añadió Pla--. Da la impresión de que es utilizado por el poder político".