La Tierra se ha quedado pequeña para las ansias de expansión del sector publicitario. La búsqueda de consumidores empuja a las empresas a cruzar la última frontera: el espacio. La marca de aperitivos de maíz Doritos será la primera en tantear el mercado extraterrestre cuando el 12 de junio se lance un anuncio dirigido a un sistema solar que está a 42 años luz de distancia. No será, por tanto, publicidad de impacto inmediato: el anuncio no llegará a los posibles receptores hasta el 2050.

Para llevar a cabo sus planes de expansión galáctica, los responsables de Doritos se han aliado con científicos espaciales de la Universidad de Leicester (Reino Unido), que transmitirán el anuncio de los snacks a través de un radar de ultrafrecuencia de 500 megahercios hacia la estrella Osa Mayor 47 (47UMA). El anuncio, según la universidad británica, se emitirá con una potencia de 10.000 vatios desde el Centro Espacial de Svalbard, en el Artico, entre Noruega y el polo Norte.

En un comunicado de la Universidad, el profesor Darren Wright, admite que "la idea de transmitir un anuncio al espacio puede ser motivo de controversia, pero no deja de tener interés científico". "Puede ser --señala el investigador-- una prueba para futuras comunicaciones de largo alcance y nos da la oportunidad de decir al universo que estamos aquí". El contenido del anuncio está todavía por decidir.