Miles de personas han pedido hoy la derogación de la nueva ley del aborto en casi un centenar de ciudades españolas, donde organizaciones provida han convocado y llevado a cabo manifestaciones de protesta, la más multitudinaria de ellas en Madrid.

La denominada Marcha Internacional por la Vida 2010 ha sido convocada por unas 270 asociaciones con el objeto de pedir que se revoque la nueva ley, que entrará en vigor a principios de julio, y que sitúa en los 16 años la mayoría de edad para decidir sobre la interrupción del embarazo y lo liberaliza hasta las 14 semanas.

En Madrid, según la empresa Lynce, especializada en el cálculo de aglomeraciones humanas mediante estudios informáticos de imágenes fijas y en movimiento, 9.726 personas participaron en la manifestación. Los datos facilitados por esta empresa tienen un margen de error al alza del 10%, que podría elevar el número de asistentes hasta un máximo de 10.700 personas, han explicado sus responsables.

Los organizadores, sin embargo, han estimado en más de 600.000 la cifra de participantes. En la marcha de Madrid han participado el portavoz de los populares europeos, Jaime Mayor Oreja; el padre de la niña Mari Luz, Juan José Cortés, y la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella. Una gran pancartas con el lema España Vida Sí. En democracia se escucha al pueblo encabezaba la protesta.

Boicotear

En Barcelona, 700 personas según la Guardia Urbana y 7.000 según los organizadores, han participado en esta manifestación celebrada en la plaza de la Bonanova. Un centenar de feministas ha intentado boicotear, sin éxito, la protesta debido a la intervención de la policía autonómica.

Entre los asistentes estaban a la marcha de Barcelona había dirigentes del PP, como la diputada Carina Mejías, el presidente del grupo municipal del Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, y su hermano, el diputado nacional y vicepresidente tercero del Congreso, Jorge Fernández Díaz, quien ha asegurado que la "principal víctima" de esta ley es la mujer.

La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, que participaba hoy en un acto del partido, ha declarado que respetaba "profundamente" las protestas, aunque ha advertido de que "nadie ni nada" les va a parar a la hora de avanzar en los derechos de las mujeres. Mayor Oreja ha asegurado que el aborto no es un planteamiento progresista sino "algo propio de los bolcheviques", ya que, al igual que la eutanasia, son "viejas recetas de los totalitarismos que han asolado Europa".