Los gastrónomos Marcus Gavius Apicius y Archestrato di Gela inspiran este año los platos elaborados por el cocinero Antonio Borrachero para las ya tradicionales cenas romanas con espectáculo que ofrece el hotel Las Lomas de Mérida con motivo del Festival de Teatro.

Las cenas, que se iniciaron ayer, continuarán todos los viernes de julio, además del 1, 8 y 14 de agosto.

El menú comienza con unos entrantes de pie a base de almendras fritas y tostas ahumadas de anchoa y de mejillones especiales y la representación de la primera de las cuatro escenas del espectáculo Vidas paralelas .

Se trata de una producción teatral de la compañía extremeña Apretacocretas de carácter cómico-festivo en la que el griego Athos (Johnny Delight) y el romano Marcial (Francis Quirós) acercan el mundo grecolatino desde una perspectiva desenfadada y gamberra acompañados por tres músicos ambulantes, uno bretón, un vikingo y un íbero.

Mediante disparatadas interacciones invitan a los comensales de las cenas romanas a acompañarles en su peculiar viaje por el túnel del tiempo, en el que cantan y cuentan las gracias y desgracias de sus respectivas civilizaciones y de sus miserables existencias.

Tras el aperitivo, se sirven unos entrantes sentados, entre los que destaca el garum , una maceración, fermentación y mezcla con vino, aceite, vinagre y sal de vísceras de atún, esturión y morena, que servía de aliño a la mayoría de los platos romanos.

"Era tan apreciado que podría valer tanto como el mejor perfume de la época" y se producía fundamentalmente en Hispania, desde la costa de Lisboa hasta Cartagena, según Antonio Borrachero.

El jefe de cocina de Las Lomas ha introducido cambios en este aliño, que también fue utilizado por los árabes únicamente mezclado con aceite y con el nombre de morris , para adaptarlo a los gustos de los paladares actuales, porque, de lo contrario, "hoy día, un plato de vísceras de pescado, no lo comería nadie", aseguró.

Borrachero seguirá una receta de Archestrato di Gela para el primer plato, tacos de emperador al estilo Torini con matices de mesta, mientras que en el segundo, se ha permitido una licencia y servirá cochinillo ibérico asado con patatas especiadas al aroma de tomillo, en homenaje al también pasado medieval de Mérida.

Una bacanal de frutas y dulce de leche de oveja con miel de flor de rosas completan el menú de las cenas romanas, que estarán regadas con cerveza, vino y licores de hierba o gloria.