Al menos 67 personas murieron y más de 70 resultaron heridas (se desconoce el número de desapareecidos) en una explosión cuando cogían gasolina de forma clandestina durante un escape de Petróleos Mexicanos (Pemex), en el estado de Hidalgo. El accidente ocurrió el pasado viernes en el municipio de Tlahuelilpan cuando decenas de personas se llevaban en cubetas y bidones el combustible que se estancó en las tierras de cultivo. «Hay muchas personas quemadas, estaban tratando de recolectar combustible donde escapaba la fuga», explicó el gobernador estatal Omar Fayad. El alcalde del municipio, Juan Pedro Cruz, explicó que, cuando se produjo la fuga en el conducto, llegaron efectivos del Ejército con la intención de controlar la zona pero ya no pudieron disuadir a 200 personas que rompieron el cerco y cogieron el combustible. Fue entonces cuando se produjo la tragedia.

«Lamento mucho la grave situación que se padece en Tlahuelilpan por la explosión de un conducto. Estoy en Aguascalientes y, desde que el director de Pemex y el secretario de la Defensa me informaron, di instrucciones para que se controle el fuego y se atienda a las víctimas», escribió el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador en un mensaje de Twitter. Al estallar, el combustible creó una especie de barrera de fuego donde se encontraban la práctica mayoría de personas fallecidas.

A través de un comunicado, la empresa Pemex informó de que personal especializado, en coordinación con autoridades de todos los niveles, atendían el incendio en el conducto Tuxpan-Tula, en el kilómetros 226 en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, donde se trasladó el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo.

El accidente ocurrió en un momento en el que varios estados mexicanos continúan con problemas de desabastecimiento de combustibles dos semanas después del inicio de la crisis debido al persistente sabotaje de conductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), que impide un restablecimiento total del suministro y que llevó al Ejecutivo a reforzar la seguridad en la zona. Desde hace 15 días, una decena de estados padecen escasez de combustible por un cambio en el modelo de suministro de Pemex, pues en lugar de conductos se usan pipas (camiones cisterna) para acabar con el multimillonario robo de hidrocarburos que en 2018 ocasionó pérdidas de unos 65.000 millones de pesos (3.003 millones de euros). Pemex hizo un llamamiento a la ciudadanía a seguir instrucciones de las autoridades, tras una de las mayores tragedias que ha sufrido el país en los últimos años.