UN VECINO de Pedraja (Valladolid), acusado de matar a su esposa reconoció ayer que cuando pensó asesinarla estaba "sereno" y era plenamente consciente del alcance de sus planes. Además, alegó que lo hizo harto de los desprecios de ella y de las burlas de sus compañeros de trabajo, que le llamaban "buey" ante las supuestas infidelidades de ella.