No puede decirse que el MD-82 de Spanair que se estrelló en Barajas fuera exactamente una cafetera vieja, pero sí sufría frecuentes achaques. Los datos que van saliendo a la luz de las investigaciones revelan que el día en que se estrelló iba a volar con un mínimo de dos averías. La primera, ya conocida, es la que retrasó su salida de Barajas. La segunda, la sufría desde hacía tres días. Desde el día 17 tenía estropeada una reversa, la pieza que cambia el sentido del empuje de los motores para frenar en los aterrizajes. No son datos que permitan formular directamente hipótesis sobre cómo ocurrió el accidente porque con ambos fallos está permitido volar, pero se añaden al complejo puzle que han empezado a construir los investigadores y arrojan sombras sobre la buena salud de la aeronave.

Los manuales de mantenimiento permiten volar durante 10 días con la reversa estropeada en uno de los dos lados, porque no es imprescindible para frenar en el aterrizaje, pero también exigen que los técnicos la bloqueen para evitar una apertura accidental. La palanca que permite al piloto accionarlo debe también estar recogida con un cable. ¿Se cumplieron estas exigencias o un error de los técnicos de mantenimiento permitió que el freno-motor se activara en el momento del despegue?

"TE VAS ABAJO" Tras el accidente, uno de los motores hallados presentaba la reversa abierta y en lo que coinciden todos los pilotos consultados es que si se abre en el momento del despegue "te vas abajo". El brusco giro a la derecha que da el avión cuando se sale de la pista se podría explicar también porque se había activado la reversa del motor derecho. Así, este empujaba hacia atrás y el izquierdo hacia adelante.

La otra avería puede parecer en principio más inocua. Estaba estropeado el calentador del termómetro (sonda, en lenguaje técnico) en el exterior del avión. Como solo se necesita para evitar la congelación del termómetro cuando se pasa de 40 grados bajo cero, se desconectó porque para un viaje a Canarias no era necesario. ¿Qué hubiera pasado si, por un error, fácil de cometer según técnicos consultados, además del calentador se desconectó la sonda?

Este es un elemento clave porque a partir de los datos que suministra se regula la fuerza del del motor. La falta de potencia durante el despegue que apreciaron muchos testigos pudo provenir de este error. Una vez más, no se trata de una hipótesis, sino de un nuevo interrogante.

RUIDO EN EL TREN Pero la mala salud del Sunbreeze (Brisa del sol) no se acaba con estos achaques. Un mes antes, el 26 de julio, había abortado un despegue en Palma de Mallorca con destino a Copenhague porque el piloto dijo haber detectado un ruido extraño en las ruedas delanteras del tren de aterrizaje. El episodio lo reveló el pasado martes del rotativo danés Ekstra-Bladet y lo confirmó Spanair. La compañía aseguró que los técnicos que revisaron la nave no hallaron problema alguno y esta pudo despegar sin contratiempos. Algunos pasajeros relataron al citado diario que "las vibraciones eran tan fuertes" que algunos temieron que saltara la puerta de emergencia.

La difusión ayer de la foto aérea en la que se ven las marcas del tren de aterrizaje cuando el MD-82 se sale de la pista de Barajas puso sobre la mesa una nueva evidencia. Pilotos consultados ratificaron la idea de que el avión se posó sobre el tren de aterrizaje con cierta suavidad, aunque antes ya había perdido el cono de cola.

"Es muy probable incluso que el piloto intentara volver a elevarse en esa franja de unos 250 metros porque sabía que si seguía avanzando por tierra el final estaba asegurado", explicó uno de los pilotos consultados, que utiliza con frecuencia la pista 36L para despegar.

La otra conclusión que sugiere la fotografía es que, de no haber virado a la derecha y haber seguido por la pista principal, el aparato podría haber quedado intacto porque la primera caída no lo destruye. Es lo abrupto del terreno lo que sentenció de muerte al aparato.