La migraña, la peor de las cefaleas, no es una enfermedad menor. El 12% de la población, casi 5 millones de españoles, sufre esporádicamente un dolor de cabeza insoportable, acompañado de náuseas y vómitos, impide tolerar la luz y cualquier sonido e invalida para todo tipo de trabajo. Además, en ocasiones, el peor aliado del mal es su remedio. Tras el 3% de los casos está la automedicación.

Con casi cinco millones de personas que la sufren en España, el coste social de este dolor de cabeza incapacitante es elevado en términos de bienestar social, así como de rendimiento escolar o laboral.

Un estudio de la Sociedad Española de Neurología, hecho público ayer, señala que cada uno de los trabajadores con migrañas (1,7 millones) pierde unos 7 días y medio de trabajo al año. Esto representa un total de 13 millones de jornadas de trabajo y se traduce en un coste de casi 1.000 millones de euros (166.000 millones de pesetas) al año.

Los episodios de migraña, que duran entre 4 y 72 horas, afectan principalmente a las mujeres, en una proporción de tres a uno repecto a los hombres.

MAL GENETICO Según la directora del programa de cefaleas del Hospital Ruber Internacional de Madrid, Margarita Sánchez del Río, este trastorno crónico viene determinado genéticamente en el 80% de los pacientes. Otros factores responsables son el estrés, los cambios en los ritmos del sueño, exceso de tabaco, café, alcohol y algunas comidas. La mayoría de los casos se desarrollan antes de los 30 años y la franja de edad en la que afecta con mayor intensidad es entre los 30 y 40 años.