Ni el frío ni las previsiones de lluvia, que no llegó hasta el final de la tarde, frenaron a los dos millones de personas según la organización y las 407.000 de la Delegación del Gobierno que se manifestaron ayer en Madrid al ritmo del Borriquito como tú contra la Ley Orgánica de Educación (LOE).

En un ambiente lúdico-festivo teñido de miles de banderas españolas, carteles y pancartas contra el presidente José Luis Rodríguez Zapatero y su política educativa, los manifestantes rechazaron la LOE al son de canciones tan populares como la del Borriquito como tú o Un globo, dos globos, tres globos... .

Los manifestantes cantaron consignas contra Zapatero, del tipo Vamos a contar verdades, tralará, aunque no sabéis de eso, tralará y gritaron Zapatero, por qué tú no tengas educación, no se la niegues a nuestros hijos .

Un reducido grupo llevaba un enorme cartel con un mensaje lleno de faltas de ortografía que decía Zapatero, grazias a ti boi ha ser lizenziado .

La manifestación, festiva en todo momento, contó con la participación hasta de un borriquito de verdad, con un letrero a lomos, en el que se leía LOE no .

También se repartieron cientos de carteles del tipo Obispos sed valientes, no estamos solos , y se corearon consignas como Religión en libertad en búsqueda de la verdad , o la Religión de asignatura y la LOE a la basura .

Una enorme banderola azul de 60 por 20 metros fue levantada y suspendida en el aire gracias a decenas de globos amarillos que fueron adheridos y fue traslada desde Cibeles hasta la Puerta de Alcalá.

En este emblemático lugar concluyó la marcha y fue en donde todos los representantes de las asociaciones organizadoras expusieron sus respectivos argumentos contra la LOE, y en donde la ex Miss Mundo Mariasela Alvarez leyó el manifiesto contra esta ley.

A continuación, el grupo Taxman pasó a interpretar canciones de los Beatles, U2, Nacha Pop y Led Zeppelin, aunque no pudo concluir su concierto a causa de la lluvia, que hizo que se dispersaran los manifestantes.

En la jornada, el señorial paseo de Recoletos sirvió de merendero para muchos manifestantes, que al inicio de la marcha sacaron sus tarteras para dotarse de fuerzas.

Más de un millar de autobuses, aparte de vehículos particulares, trenes y al menos dos aviones fueron utilizados para llegar a Madrid por los manifestantes procedentes de toda España, y con edades de lo más diverso, incluso bebés en carrito.

No faltaron tampoco quienes hicieron negocio con la protesta, puesto que las banderas españolas se vendían en puestos improvisados a diez euros y las trompetillas de plástico a tres, y también había quienes facilitaban lotería, aprovechando la muchedumbre.

También se pidieron donativos con huchas de plástico para costear los gastos de los folletos informativos para explicar los motivos de rechazo de la LOE y se vendieron pulseras naranjas donde se leía LOE no .

Incluso el escritor Fernando Sánchez Dragó expresó su apoyo a los manifestantes, aunque no asistió a la marcha, con una carta leída por los organizadores.