La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, considera que "quizá haya que plantearse algún tipo de sanción económica" para aquellos padres que hayan recibido un aviso para asistir a un curso de sensibilización tras haberse emborrachado su hijo y no quieran acudir.

En un entrevista que publica 'Abc', Montserrat ha explicado que este tipo de multas serían para padres con hijos reincidentes en el consumo de alcohol que tengan ese comportamiento "irresponsable" de no querer asistir a esos cursos.

Esta media ya se contemplaba de alguna forma en el último borrador de una norma integral para regular el consumo de alcohol, venta y publicidad durante la etapa de la ministra Ana Mato, en el que se hablaba también de multas a los menores que serían abonadas por los padres en caso de insolvencia o con trabajos a la comunidad.

En su opinión, sin prohibiciones y sanciones es difícil que una norma se cumpla. "Hemos de concienciar a la sociedad", asegura la ministra, quien apuesta porque si alguien ve a un menor beber en una plaza llame a la policía. "No se va a detener a nadie, aunque si da positivo se llamará a los padres o tutores para informarles que su hijo está bebiendo", explica Montserrat.