Un total de 60 ministros de Exteriores, entre ellos la española Arancha González Laya, han suscrito una declaración conjunta sobre la protección de la salud y los derechos sexuales y reproductivos y la promoción de la perspectiva de género en la pandemia de covid-19, según informó ayer Exteriores.

La declaración avisa del agravamiento de las desigualdades para las mujeres y las niñas y alienta a los gobiernos de todo el mundo a garantizar el pleno acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva.

En ella, avisan de que la financiación destinada a estos derechos debe seguir siendo una prioridad para evitar un aumento de la mortalidad maternal y perinatal, una demanda no cubierta de contracepción y un mayor número de abortos inseguros y enfermedades de transmisión sexual.

También recuerdan el papel mundial de enfermeras, comadronas y trabajadoras sanitarias y sociales, que requieren equipos de protección. «La seguridad de los embarazos y partos depende de estos trabajadores, de instalaciones adecuadas y de un seguimiento estricto de la prevención de las infecciones», dicen.

Se comprometen, así, a que todas las mujeres y jóvenes en edad fértil tengan acceso a productos de salud reproductiva y piden a todos los gobiernos del mundo que aseguren el acceso pleno a servicios de salud sexual y reproductiva.

En la misma línea, el Gobierno español ha decidido presentar ante la Asamblea General de la ONU una resolución sobre el impacto de la pandemia en las mujeres y las niñas. La ministra lo habló ayer con su colega filipino, Teodoro L Locsin Jr, y acordaron que los trabajarán juntos en esto.