El inspector de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) que en agosto denunció haber sufrido el robo de un maletín con informes secretos en el aeropuerto de El Prat no contó toda la verdad. En su denuncia a los Mossos d´Esquadra aseguró que le habían arrebatado el maletín y alegó razones de seguridad para no detallar su contenido, que calificó de "informes secretos sobre energía atómica". Tras una exhaustiva investigación y el visionado de todas las grabaciones del interior y el exterior del aeropuerto, los Mossos concluyeron que el maletín no fue robado allí.

El robo, que ayer avanzó El Mundo , hizo saltar las alarmas. Tras presentar la denuncia y negarse a dar demasiados detalles sobre el contenido , el inspector tomó el avión que tenía previsto, hasta Madrid. Los Mossos siguieron investigando y analizaron las grabaciones e buscaron interlocutores para hacer llegar a los delincuentes que operan en el aeropuerto que recuperarlo era de vital importancia. Con los días y tras comprobar el nulo interés de la OIEA, los Mossos rebajaron la intensidad y se olvidaron del robo hasta ayer.