Más de la mitad de las personas con alergia a las picaduras de avispas y abejas no acuden al especialista porque desconocen que existe tratamiento, advirtió ayer la Sociedad Española de Alergología, que estima en 300.000 el número de españoles que padece este tipo de reacciones. Según explica el Comité de Alergia a Himenópteros de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaci), el verano es la época de mayor incidencia de picaduras de estos insectos, cuya agresividad aumenta con el calor y, además, la población realiza un mayor número de actividades al aire libre.

Los síntomas más frecuentes de estas reacciones alérgicas son el picor y las erupciones cutáneas generalizadas, los hinchazones, la dificultad respiratoria, el mareo intenso o la pérdida de conocimiento. En los casos más graves puede causar una reacción anafiláctica que puede llegar, incluso, a ser una causa mortal.

"Cada año fallecen en España entre tres y diez personas por alergia al veneno de las avispas y abejas, que se agrava en las personas mayores y con enfermedad cardíaca", explica Lluis Marqués, alergólogo del hospital de Santa María de Lleida.