CCasi la mitad de los fumadores españoles (el 46,3%) han intentado dejar el tabaco desde el pasado enero, fecha en la que entró en vigor la ley del tabaco, según una encuesta hecha pública ayer por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria. La investigación, realizada entre 2.023 personas en centros de salud de ocho comunidades autónomas, revela que en el mismo periodo del 2005 este porcentaje fue sólo del 26%. Según explicó Luis Aguilera, presidente de la sociedad médica, esta diferencia demuestra el éxito de la ley desde el punto de vista de la salud.

ACEPTACION DE LA LEY No obstante, solo un 14,5% de los que han intentado dejar de fumar en lo que va de año llevan más de tres meses sin hacerlo. El 72,5% ha recaído antes de un mes. Pero la mitad de los fumadores se plantea dejar el hábito en lo que queda de año.

Según la encuesta, solo el 15% de la población se muestra contrario a la ley. El porcentaje de oposición a la norma sube al 29% en el caso de los fumadores, lo que se interpreta como "un elevado nivel de aceptación".

La sociedad que representa a 18.500 médicos de familia opinó que la ley se cumple en los centros de trabajo pero no ocurre lo mismo en bares y restaurantes. A su juicio, ha sido un "error" que haya espacios con restricciones parciales, cuando se han demostrado los beneficios saludables de la restricción total. Por esta razón, anunciaron que pedirán al Gobierno una reforma de la ley para que desde el 2007 se prohíba fumar en todos los locales cerrados.

El vicepresidente de la sociedad, Asensio López, consideró

"imprescindible" un compromiso de todas las administraciones para financiar la deshabituación tabáquica. Según sus cálculos, esta prestación, siempre bajo prescripción médica y con compromiso de seguimiento por parte del paciente, no supondría más de 24 millones al año.

En opinión de esta sociedad científica, hay que combatir todos los resquicios que puedan poner en peligro el avance logrado desde la salida de la ley mientras que los médicos también denunciaron que la mayoría de los ayuntamientos se están inhibiendo y permiten la venta.