Las dos principales asociaciones de motoristas se oponen a que se traslade a España la medida que tan buenos resultados ha dado en Francia de prohibir la venta y matriculación de las motos de más de 100 caballos de potencia. Lucha Motera y Mútua Motera coinciden en que es un error vincular la potencia con el número de muertes en la carretera porque, aseguran, no hay ningún estudio que indique que la velocidad que pueden alcanzar las máquinas sea la causa de los accidentes.

La siniestralidad de las motos ha experimentado una evolución mucho más positiva en Francia que en España tras la prohibición en el 2004 de los vehículos que alcanzan los 200 kilómetros por hora en pocos segundos.