Una tortuga gigante, que se cree que era la más vieja del mundo, ha muerto a los 270 años en el zoo de El Cairo, según ha informado el periódico egipcio Al Ajbar.La tortuga ha fallecido debido sencillamente a su longevidad, que la había convertido prácticamente en un animal incapacitado, según ha explicado al diario el director de la administración central del zoo, Talaat Sidrak.Esta tortuga fue regalada al zoo por el rey Faruk (1936-1952), el último monarca de la dinastía egipcia destronada por los llamados "oficiales libres" y que era un gran aficionado a la caza y la colección de animales exóticos.El animal ha muerto casi dos semanas después de que otra tortuga gigante, llamada Adyaita, de al menos 250 años, falleciera en el zoo de Calcuta, en la India, a donde fue llevada a finales del siglo XIX en tiempos del dominio británico.